Se utiliza como suplemento alimentario mineral para distintos tipos de animales tales como bovino, equino, caprino, entre otros.

El cloro (Cl) y el sodio (Na), los dos minerales de la sal, son imprescindibles para una correcta hidratación, digestión y asimilación de los nutrientes de los animales. Además, la sal mejora el sabor y la textura del alimento para los animales, haciendo que les resulte más apetitoso. Esto también contribuye a que los animales se alimenten mejor.

La falta de sal provoca baja productividad en el ganado, disminución del celo y de la fertilidad de los animales. Además, empeora el desarrollo muscular y óseo.